martes, 25 de febrero de 2014

¿Una comisión de la verdad, para revisar de acuerdo a tu "verdad"?

No está nada fácil la cosa: El adjudicado presidente Maduro insiste en equivocarse: No creo que alguien vea con buenos ojos que después de insultar a los gringos, horas después vengas a pedirles que nombren un nuevo embajador para "aclarar las cosas" en las ya tortuosas relaciones internacionales que mantenemos. 
En lo personal, creo que debes mantener lo que dices y no estar reculando de seguido; seguramente estamos claros en que los hombres, mantenemos lo que decimos, y aceptamos las consecuencias de nuestras afirmaciones y decisiones. 
Similar cosa deberás considerar con la reciente declaración y orden que diste, en torno al tema de crear una nueva comisión de la verdad. Eso de pedirle a la asamblea que haga semejante comisión por la obtención de la verdad, es como pedirle al gobernador del Táchira, José Vielma Mora, que mantenga lo que dice, o pedirle a unos zamuros, que cuiden carne.

Ahora, lo que mas estridente suena en tu declaración sobre esa comisión, es lo siguiente:

"conforme una comisión de la verdad e investigue todos los crímenes fascistas. Espero el día en que se haga justicia de este asedio fascista"

¿Pretendes entonces nombrar una comisión, para que investigue no todos los hechos criminales que hayan ocurrido sin importar el bando, sino que investiguen exclusivamente a los que protestan y que en tu opinión, son fascistas?

¿Ves el problema Maduro?; ese es tu mayor problema y desgracia: La negación absoluta y permanente de que algo pueda ser imperfecto en la revolución y ahora en tu gobierno.
Esa es justamente la actitud que ha permitido desde los tiempo de Chávez, que el barco de la revolución hiciera agua desde el mismo comienzo de su viaje por el mar de la esperanza de todos aquellos que tuvieron fe en un cambio sincero y humilde.

Esa comisión de la verdad será tan improductiva como la reunión por la paz que pretendes convocar.

Compatriota Maduro, cada paso que das lo estas dando hacia el final de un proceso político en Venezuela. Es duro, pero estás demostrando con cada palabra y acción, que tener a un "sucesor monárquico" en la presidencia, es tan malo como tener a un dictador.




No hay comentarios: