lunes, 10 de julio de 2023

Unas recomendaciones valiosas a la hora de pensar en ir a votar

 

Hoy no traigo palabras propias; hoy toca citar a un gran autor del mundo de la geoestrategia actual; el Coronel español Pedro Baños, de quien espero indulgencia por permitirme citar sus recientes recomendaciones en el marco de las próximas elecciones españolas, y que en mi opinión constituyen una herramienta esencial que todo votante necesita para elegir con inteligencia en cualquier elección... ...allí donde exista una posibilidad real de cambiar algo.

No hay muchas maneras de salir del laberinto mágico de dependencia en el que nos han metido los políticos que han ido gobernando cada vez con más descaro en nuestras naciones, y esto que les dejo a continuación, es una de esas formas de liberarnos que considero hemos de tener presente para cuando la oportunidad surja.

Estas son las palabras de Pedro Baños:

"Son un resumen de los que incluyo en La Encrucijada Mundial y Détox Social (agotado):

- Lee y analiza en detalle los programas electorales de los partidos políticos antes de escoger una opción en las urnas.

- Revisa bien el historial de tus políticos preferidos; si han engañado o han causado estragos con su gestión, recházalos sin dudar.

- Duda de aquellos políticos que hayan hecho lo contrario de lo que prometieron hacer por ti y por tu país, y que mienten sistemáticamente.

- Nunca confíes en políticos que hayan prevaricado o incurrido en actos delictivos, como apropiarse de dinero público o hacer uso de información privilegiada para lucrarse personalmente.

- Antepón la razón a la emoción. Si te emocionas, te volverás vulnerable y te atraparán en sus redes emocionales, lanzadas desde sus departamentos de marketing político, hasta convencerte de que ellos son la única opción viable para tu bienestar y el de tu país.

- Rehúye toda acción de marketing proveniente del ámbito político. El marketing se basa en la estrategia, y ésta, en el engaño.

- Huye del tono mitinero en el que se enardece a las masas para mayor gloria del líder de turno.

- Desconfía de los políticos profesionales que se enquistan o pretenden hacerlo sine die en sus cargos públicos para vivir a costa del erario.

- No votes por inercia, porque es lo que siempre has votado, por ser la tradicional opción política de tu familia, porque te sientes identificado con unas ideas vagas, por la presión social o sólo porque te gusta el candidato.

- Vota a los candidatos que estén bien preparados, con la cualificación mínima imprescindible para desempeñar su elevada responsabilidad.

- Otorga tu confianza a los que se comprometan a llevar a cabo lo que a ti te gustaría que sucediera, lo que consideres viable y positivo para el conjunto de la nación.

- Vota a personas que hayan demostrado que son de fiar y te propongan un programa de gobierno realista.

- Si un político dice constantemente lo que quieres oír, desconfía. Si todo te lo pone de color de rosa y ofrece en demasía, no te fíes ni lo más mínimo.

- Confía en aquellos políticos honestos que renuncian a su vida privada, en muchos casos mejor remunerada, para entregarse a los demás.

En definitiva, votar -o abstenerse o votar en blanco- es un acto de gran responsabilidad y un hecho relevante en el devenir de la democracia. Máxime cuando lo que tenemos es una partidocracia que vive de captar el voto, a costa de lo que sea necesario.

¡Que tu inteligencia política guie tu mano el día de las elecciones!"


Una nota al pie de página: 
Para el caso de nuestros países iberoamericanos, el voto nulo sabemos que no es considerado ni de lejos como el "mensaje" de una sociedad descontenta por el cómo se están llevando las cosas; por eso es que incluso sin importar si hasta el 50% decidiera votar nulo, sabemos que los políticos se harían los desentendidos y lo ignoraran, y eso se mantendrá hasta tanto vayamos hacia un sistema electoral donde en caso de darse, -digamos-, una votación nula equivalente a al menos la misma cantidad de votos que se requiere para un referéndum, entonces la población sea obligatoriamente consultada y el mecanismo refrendario se active.

En todo caso eso quedará para el futuro. Hoy es sólo fantasía.

Por ahora, consideren estas sugerencias de Pedro Baños hoy. Podríamos tener allí una hoja de ruta interesante, insisto, para cuando el guardar silencio durante una elección, sea motivo de preocupación para los dirigentes electos.

miércoles, 5 de julio de 2023

Una recomendación desde YouTube para ustedes.


Les dejo el link de un productor de contenido independiente en You Tube; un hombre con una manera sencilla y fresca de hablar de lo que nos hunde como sociedades en esta parte del mundo. 

Les invito a ver la serie de capítulos titulada "Los engranajes de Occidente": https://youtu.be/_mDsPCkNP-A

lunes, 3 de julio de 2023

Cuando votar se volvió la versión adulta de mandar una carta a los Reyes Magos.

 

Ya sabemos que escribir todos los meses en este blog sobre lo que pasa en Venezuela no se antoja práctico simplemente porque las cosas no cambian tan rápido como quisiéramos, -o peor, como pudiéramos concretarlo en caso de estar organizados como ciudadanos-. 

Y es que pasado este período de tiempo en silencio, la pregunta sigue en mi opinión, siendo saldada con la misma respuesta en su forma y fondo: ¿Realmente hay en Venezuela alguna “elección” a la vista de nuestra sincera mirada, que vaya a cambiar las cosas?

Permítanme decirlo de otra manera, más detalladamente:

¿Con esta oposición + oficialismo + FFAA dominando absolutamente el panorama político y económico  venezolano, realmente hay alguna “elección” a la vista que valga para un cambio concreto -y real-, en Venezuela?

¿En esas hipotéticas próximas “elecciones”, podrán ir a votar sin miedo a nuevas listas Tascón, los venezolanos en el extranjero -sin importar el país donde estén-? 

¿Podrán votar todos los que se quieran registrar en el registro electoral, sin impedimentos y sin encontrar a última hora que han sido reubicados en centros electorales sin ninguna conexión real con sus domicilios?

¿Para el momento de esas “elecciones”, habrá sido purgado de toda irregularidad el actual registro electoral, o por el contrario, podrán seguir votando extranjeros ilegalmente cedulados, en maquinas electorales instaladas irregularmente en casas de políticos afiliados al régimen?

Ustedes díganme además:

¿Habrá cero ventajismo por parte del gobierno?; No coartarán a la gente para obligarles a votar?

¿Podrán los resultados ser verificados y contrastados con los boletos en papel emitidos, mediante un CNE transparente y neutral?;

¿Las FFAA se limitarán a custodiar, sin opinar ni abusar de su autoridad?

Y finalmente:

¿Evitaría el régimen el manipular nuevamente a la oposición (sea con dinero, inhabilitaciones arbitrarias como el caso de María Corina Machado, o la selección del candidato "opositor idóneo" que los enfrentará)?

¿Gente como Guaidó, Leopoldo, Cabello, o ese conjunto enorme de miserables que se han alimentado del dinero público de la nación, serán confrontados y sometidos a juicio?

 

Creo que estaremos de acuerdo sobre que la respuesta corta y áspera para todas estas preguntas, sigue siendo un rotundo “NO”, porque votar en nuestro país se ha vuelto únicamente la “versión adulta de escribir una carta a los reyes magos”, con similares resultados a los obtenidos en nuestra infancia: la entrega de un juguete para que nos entretengamos hasta que llegue el siguiente, mientras seguimos creyendo en personajes que resuelven con magia las cosas para nuestro provecho.

Qué lejos estamos entonces de ser una sociedad temeraria y clara en lo que quiere, capaz de decir sin miedo: “o cumples lo que prometes en base a los lineamientos nacionales requeridos, o te derrocamos y enjuiciamos”.

A consecuencia de ello es que estamos en una situación que se siente ya permanentemente como estar en un “circo” de tercera categoría a la orilla de un pueblo olvidado, (con música rayada y carpa remendada), cuyos payasos sin chistes nuevos lucen cínicos y fastidiosos, mientras que los espectadores se quedan sentados y languidecen junto con todo lo que conocieron, porque no tienen –o no saben- cómo hacer algo más.

No tenemos como comunidad una determinación al cambio, porque no existe tal comunidad ciudadana; sólo seguimos siendo una variopinta agrupación de intereses dispersos aún incapaces de conjugar en una sola acción, derrocamiento, juicio y enmienda, ante el mas mínimo aviso de que las cosas no van por buen camino.

Es esa carencia social la que permite una y otra vez esos odiosos episodios como el de un Nicolás Maduro dictando sin rubor ni consecuencia para él y su círculo de poder cada 1ro de Mayo, qué es lo que se gana y qué no en un salario mínimo, o el del bochornoso y decepcionante episodio de Juan Guaidó con su fracaso político y su posterior (y conveniente para él) escape hacia ese refugio de corruptos y testaferros en el que se ha convertido EEUU, tras haber robado dinero y dilapidado la oportunidad de cambiar las cosas.

Todos esto es posible porque una sociedad que carece de la capacidad para mostrar músculo organizacional y ser capaz con ello de ejecutar el derrocamiento de cualquier mal gobierno, seguido esto de un juicio rápido y justo de los culpables, y de una enmienda de lo hecho mal, tampoco tiene la capacidad para decirse libre por sus propios actos.

Por eso seguimos igual, porque insistimos en justificarnos.