martes, 17 de febrero de 2015

No es un Tucano; ¡Es el avión del Sr. Gru (*)!!!

Puntualicemos algo antes de iniciar: Yo no estoy de acuerdo con golpes de estado, pero reconozco que cualquier militar podría encontrar más razones ahora, de las que en su momento vieron los golpistas del 92, para intentar una asonada que definitivamente seria violenta y sangrienta como ninguna.
Dicho esto, sin embargo, no por lo anterior voy a aceptar cualquier laboratorio o teatro montado por quien maneja el poder absoluto en Venezuela, y es por esa razón me haré pasar por el “entretenido” también con “el maíz” que los altos jerarcas y políticos revolucionarios le lanza al “gallinero” de la oposición, asumiendo con ello que en efecto, ahora fue el turno de un avión de fabricación brasileña, (El apodado “Tucano”, conocido militarmente en nuestro país como T-27), ser el protagonista de lo que ellos proponen, aunque más como si de la película “Mi villano favorito” (*), se tratara, con el Sr. Gru y su extraña nave capaz de llevar más carga bélica de la que el propio volumen interno de avión sugiere ser capaz, como única via para poder con ello “arrasar” la impresionante cantidad de objetivos que Diosdado Cabello señala nada más en Caracas, durante el pretendido golpe de estado.
Déjenme decirles que el avión T-27 es fundamentalmente una aeronave de adiestramiento, con capacidad secundaria para ataque visual al suelo (apoyo táctico), sin medios ópticos activos de puntería/señalización de objetivos. Ciertamente puede llevar armamento, pero les comento que si lleva un par de bombas, no puede llevar cohetes, y si lleva cohetes con la capacidad de penetrar el bunker que debe ser Miraflores o la casa donde Maduro pernocta o trabaja, entonces no puede llevar ametralladoras (02), y lo que definitivamente no puede hacer, es llevar pilotos y las exageraciones de los políticos al mismo tiempo.
NOTA: A esto agréguenle que de acuerdo a lo que la misma FANB pregona, desde hace tiempo ya no es posible que sobre espacio aéreo venezolano, sobrevuele aeronave alguna sin autorización, y tendrán el cuadro completo.

Creo que otra vez un refrán popular viene a explicarlo todo: “El ladrón juzga por su condición” (los rusos tienen un refrán parecido: “Si eres martillo, tratarás todo como si fueran clavos”)
El altísimo mando político del gobierno, cuna de lo mejor de la revolución en el poder, ha convertido en acto irreverente, tanto los magnicidios, (“minicidios” o asesinato en el caso de Maduro, porque de “magno” el no tiene nada), como los intentos de golpes de estado, (casualmente todos han sido descubiertos justo a tiempo para evitarlos), casi que tentando a la providencia con unos asuntos que dejarían mas heridas sociales de las que ellos mismos sufrirían.
Ahora, aunque a mí no me agrade tal resolución violenta de la realidad que vivimos, no podemos tapar el sol con un dedo, como dicen, y menospreciar el hecho de que a medida que el terreno por el que caminamos la vida nacional, se haga mas estéril y sin oportunidades reales de rectificación, más probable es que alguien opte por un atajo que al final termina en nada, pese al trauma que significaría.

Hay que entender que la situación actual se mantiene solo por cuatro factores claves que se han vuelto rígidos en la mente de la sociedad venezolana, inoperante ya para reaccionar, así como en sus raquíticas estructuras republicanas de gobierno, con terribles consecuencias:
1.- El que se monta en el poder en Venezuela, no lo suelta por nada, no valiendo consciencia moral alguna.
2.- No hay posibilidad de despedir a Maduro, sin que pase la mitad de su mandato;
3.- No hay institución independiente con la suficiente competencia como para solicitar la destitución del presidente de la republica, o del presidente de la asamblea, o de los máximos jerarcas de las instituciones, bajo argumentos validos y legales.
4.- El artículo 350 de la constitución, no puede ser activado por falta de coherencia política, por un lado, y por el otro, por la represión violenta que FFAA y Poder Judicial, alineados con el gobierno, realizarían, alegando convenientes razones legales para si.

Los golpes y los magnicidios, se han banalizado en nuestro país, casi tanto como la idea de que política y moral, deberían ir de la mano. Por eso estos resultados.


No hay golpes continuos; solo torpeza gubernamental permanente.

lunes, 16 de febrero de 2015

Cuando sobre la escasez, no se dice la verdad

Publican en Panorama (periódico del Zulia) un articulo basado en la entrevista realizada a  Andrés Eloy Méndez, superintendente de Precios Justos:
"No hay escasez, hay suficiente cantidad de productos, pero la gente ha comprado, por ejemplo, en el mes de enero, lo que se debe comprar en tres meses, hay una sobredemanda que debe sin duda tender a normalizarse en los próximos meses"

Bueno, para no extenderme mucho en esto, pues solo quiero recordar algo que ya todos deberíamos manejar, el punto aquí es como por interés político electoral, no se termina de decir la verdad: En ciudades fronterizas como Maracaibo, (donde producto del descontrol migratorio, ya mas de la mitad de su población es de origen colombiano), se compra en un mes, lo que debería alcanzar para tres meses, porque la mayor parte de las compras, se hacen con el único propósito de dirigirlas hacia el contrabando de extracción hacia Colombia. (el resto se reparte entre la reventa en la calle, y a lo que la gente común logra conseguir directamente)

Con los bajísimos precios de los alimentos en Venezuela, -en comparación con Colombia-, debido a la paridad cambiaría Peso-Bolívar, producto de la distorsión económica inducida por el mismo gobierno Chávez-Maduro, el negocio y la ganancia rápida producto del "bachaqueo" en los supermercados y abastos gubernamentales del país, es irresistible e imparable.

Eso va a seguir hasta tanto el precio de los alimentos incite a su contrabando hacia Colombia. Miles de empleos se generan con este contrabando, y las mafias que han proliferado con dicho fenómeno, y el dinero generado por tan brutal ganancia, da para comprar a cualquiera que pudiera intentar obstaculizar la salida de estos productos. 

Fracaso absoluto del gobierno, de las FANB, y de la misma sociedad que se arrodilla ante el poder del dinero, en un país que perdió el rumbo de la ética y lo justo.

viernes, 13 de febrero de 2015

Otra vez el cuento de los golpistas que le temen a un golpe.

Antes que nada, aclaremos: Toda evidencia nuevamente de un golpe, es solo la mostrada por el mismo gobierno que sería objeto de la acción militar. No habiendo institución independiente en Venezuela que investigue, debemos dejar precisado que todo es circunstancial, dependiendo de quien lo diga.

Dicho esto, nos encontramos ante la paradoja donde los que intentaron dos veces dar un golpe, y hoy están en el poder (a excepción de Maduro y Cilia, que solo son arrimados posteriores a los eventos golpistas en si mismos, y quienes irónicamente son los que encabezan el "top ten" de los premiados por los "esfuerzos" de otros), viven ahora a la expectativa de cuanta acción "reivindicatoria" (según siempre el ojo de los golpistas de turno), se planee o ejecute contra ellos.

¿Ironías de la vida entonces?

¿Cómo si estamos según Maduro, en un "Golpe continuado", ahora se intenta dar un golpe?

¿Cómo es que la fuerza armada declarada por el mismo Maduro como monolítica y socialista, ahora es capaz de acometer este supuesto acto?

¿Se trata de otro trapo rojo para distraer efectivamente la atención?

¿Con golpe o sin golpe, este país puede ponerse peor?

Termino concluyendo una vez más, que los refranes populares tienen su sabiduría implícita: "El picao por culebra, cuando ve un bejuco, salta".


Aquí TODO lo que pase, es culpa tuya , Maduro. Has sido ineficaz, y torpe para llevar la presidencia de la república que resta en Venezuela. 

En un país presidencialista hasta los tuétanos como este, TODO es culpa o gracias al Presidente que calienta sus nalgas en la silla de Miraflores.

En este caso, la culpa es tuya.

NOTA: Hasta manejando buces, eres malo: infringes la ley de transito y su reglamento.

jueves, 12 de febrero de 2015

Sobre el uso de armas mortales para controlar manifestaciones.

La reciente resolución 008610 del Ministerio de la Defensa (publicada en la Gaceta Oficial del 27 de enero de 2015), que establece en su artículo 22 el “uso de la fuerza potencialmente mortal, bien con el arma de fuego o con otra arma potencialmente mortal”, como último recurso para “evitar los desórdenes”, no es más que un distractivo para el colectivo nacional, toda vez que no hacia falta esta publicación legal, para que las otrora Fuerzas Armadas Bolivarianas de Venezuela, diera rienda suelta al momento de optar por el uso de armas mortales durante la represión de manifestaciones.

¿Qué creen que fue lo que ocurrió hace un año ya, durante aquellas multitudinarias manifestaciones, la mayoría espontaneas y originadas en la impotencia del ciudadano o ciudadana de a pie, y que terminarían siendo descalificadas hábilmente por el gobierno bajo el epíteto de "guarimba", como señalamiento directo a planes golpistas supuestamente orquestados por la burda y patética oposición venezolana?.

Les digo que la violencia y la brutalidad al momento de reprimir, no necesita de esta formalidad en un decreto, para convertirse en algo más mortal de lo que ya es. Las manifestaciones publicas pasaron a ser expresión arriesgada en un país donde el derecho humano pasó a ser un valor relativo, dependiendo del interés desde el cual se le mire.

Insisto: Las FANB no necesita de papeles y decretos para mostrar en los últimos 12 meses, lo que son capaces de hacer por el gobierno.

No se dejen distraer de la verdad...

...La realidad está más allá de chavistas y oposicionistas; más allá de sueños inútiles de transiciones políticas de la mano de los mismos que son protagonistas de esta casi que fútil etapa republicana...

NOTA: Pero no culpen a todo el componente FANB; recuerden que todos obedecen a una estructura vertical de mando; en más de un sentido, ellos están secuestrados en su propia realidad, controlada por el aparataje militar-cívico.



martes, 3 de febrero de 2015

O son maquiavélicos, o son estúpidos.

No hay de otra: Ya no hay manera alterna para buscarle una interpretación a la cadena de sucesos, decisiones, y consecuencias que estamos viviendo; o es una enorme estrategia para desmontar al país y reconstruirlo a la imagen y semejanza Dios sabe de que, mediante una estudiada y cuidadosa puesta en escena de distracciones psicológicas y multitud de caminos dispersores que no llevan a ninguna parte, o estamos ante el gobierno más torpe e incapaz de la historia de Venezuela.
Yo estoy claro en que Nicolás maduro es el inútil más exitoso que ha tenido la política venezolana en los últimos 30 o 50 años (no tanto por sus decisiones, sino por su gran capacidad para vivir en la sombra y cobijo del líder supremo y eterno de su propia revolución), llevado siempre de la mano de la por ahora convenientemente silenciosa Cilia Flores, que apunta a manejar todo tras el escenario, todo el poder que no está en manos del resto de los protagonistas políticos del régimen revolucionario-chavista-madurista.

Todos ellos, burgueses de nueva estirpe, obesos por tanta ambición, y encumbrados en el poder tras solo haber tenido que demostrar la paciencia de sostenerle los testículos a Chávez sin chistar durante estos 23 años (1992-2015), tienen ahora en sus manos el control absoluto del país; poder que solo podría ser perdido por propia decisión u omisión ante los factores claves que mantienen el statu quo de la revolución: El dinero necesario para comprar todo y a todos.

Se le atribuye a Maquiavelo la expresión: “desde hace un tiempo a esta parte, yo no digo nunca lo que creo, ni creo nunca lo que digo, y si se me escapa alguna verdad de vez en cuando, la escondo entre tantas mentiras, que es difícil reconocerla”, ¿Y no es acaso el estilo de monologo y proselitismo que caracteriza al político actual, incapaz ya de decir 3 verdades seguidas sin perjudicarse a sí mismo?
Quizás atribuirles aspectos del conflictivo Maquiavelo sea hasta una injusticia de mi parte, ante los pírricos resultados que tantos años de revolución incapaz de decir y manejar todas las verdades que ahora nos abruman por la falta de entendimiento, se han mostrado incrustadas como lombrices, en los ahora malnutridos miembros de una sociedad venezolana dividida e irreconciliable en los términos que hasta hoy se manejan.

Al país le secuestraron la sensatez, y nadie lo denuncia, porque ni siquiera se han dado cuenta.

La aplicación continua y desenfadada de este enorme ardid metódico para el manejo de las masas y sus diferentes canales de comunicación, sin que casi nadie repare en los orígenes militares de tales principios básicos de la estratagema de control-distracción-conquista, no cesan de horadar la voluntad dispersa y vaga de una sociedad atomizada en sus orígenes, intereses e intolerancias.
Deshacer las estructuras institucionales de una nación, para luego reestructurarlas a conveniencia de intereses impronunciables, haciéndola pasar por la muy dañina etapa de “país fallido” previamente, parece una imagen imposible de plantearla como real, pero que sin embargo, se erige como una de las dos opciones posibles ante los hechos contundentes observables en Venezuela, frente a las acciones de un gobierno y de su “particular” y “estéril” oposición: o son inteligentemente despiadados, o son la criatura malformada parida antes de tiempo por una sociedad enferma, que pese a todo, aún tiene cura.
Escojan ustedes el mejor escenario. Igual perdemos todos.
Una sociedad bloqueada en su posiciones extremistas que no conceden razón en nada al oponente, es una amalgama de voluntades incapaz de dirigirse a un mismo destino. Donde uno no reconoce razones e ideas positivas y viables en el otro, no puede esperarse un avance pacifico, e irónicamente, eso solo le da apertura a las tesis violentas que procuran la ruptura y el control mas férreo de aquellos que en sus extremismos e intolerancias, resultan estar divididos y débiles dentro del confinamiento de la nación a la que tratan de darle vida por separado.
Ya no queda casi opción viable donde un escenario nos ofrezca algo bueno apenas mas allá de la satisfacción de “solo” comenzar a cambiar las cosas, y no para nosotros, sino para los que vienen después de nosotros; solo nos van quedando escenarios donde el denominador común es el de que aprendamos el crudo valor de la palabra sacrificio, como única vía sensata y demostradora de nuestro amor real por aquellos que nos sucederán.
Creo que solo entonces las cosas comenzarán a tomar otro matiz en el horizonte que hasta hoy, se muestra negro como la noche sin luna.
Las cosas comenzarán a cambiar cuando los oposicionistas acepten que se encontraban atados a una ilusión que guardaba oscuros secretos, al tiempo que los oficialistas reconozcan el error de haber puesto toda la sindéresis y razón, en un solo hombre ahora fallecido.
Cuando la arrogancia de paso a la humildad sin retaliaciones más allá de lo estrictamente constitucional y ético por venezolanidad pura y elevada, podremos decir que las cosas en verdad, están cambiando hacia algo bueno y constructivo.

Sean maquiavélicos, o sean estúpidos, no nos queda de otra que superarnos y sobrepasar tan calamitoso camino tomado una y otra vez para buscar soluciones que no han pasado por otra cosa que no sea por el desprecio a los valores ajenos, o al uso errático y derrochador del dinero nacional, y por lo que no nos queda más que buscar más allá de todo lo visto, un nuevo enfoque nacional, más calmado, que al no agredir la memoria de nadie, tenga siempre las puertas abiertas para quienes estén dispuestos a crecer y aceptar que por encima de la constitucionalidad, nada puede estar, en un colectivo humano reunido bajo el concepto de venezolanidad.