jueves, 21 de abril de 2011

Las fuerzas de seguridad en Venezuela.

¿Solución radical a un problema ya extremo?

Quiero detenerme sobre la vida y caminos de quienes constituyen en tiempos de “paz” -entre comillas, adrede-, el cuerpo ejecutor de la justicia, garante de las libertades y responsabilidades ciudadanas.

El tema me parece tan interesante, como triste en estas latitudes tercermundistas. No puedo abordar el tema como si de policías estadounidenses o rusas se tratara. El asunto es venezolano, como son todos los policías, y sus penurias.

Creo que es uno de los aspectos que mas desprecian los venezolanos en el sentido de la poca atención que les damos. En un país donde el nivel de delincuencia necesitará probablemente de represión fuerte y suspensión de algunas garantías constitucionales para ponerle orden en un principio y un tiempo bien delimitado, la planificación estratégica que diseñemos para este menester, también será vital, como lo es desarrollar aquella policía consejera y comunitaria que a la postre, asumirá en control de los ya “apaciguado”.

Permítanme decirles en mi opinión, (y con la seriedad que esto requiere y aún a riesgo de ser censurado por muchos venezolanos), que, aunque la pena de muerte suena correcta en estos tiempos para los asesinos de niños, violadores y corruptos responsables de desfalcos multimillonarios, se hace necesaria por lo menos durante 5 o 10 años a partir de la fecha de implementación de este plan nacional de emergencia judicial, la instauración constitucional de la pena a cadena perpetua, con la misma efectividad y contundencia con la que a los jueces elegidos para este proceso, se les asegure la inmunidad y la garantía de asilo en otro país, si lo desean para garantizar sus vidas, al final del periodo pautado para impartir justicia de acuerdo a las leyes vigentes y/o temporales.

Por estas razones, y sin ir más lejos, en lo puntual, estemos claros en varias cosas que no pueden mantenerse como conflictos sin sentido:

I. Un policía incorrupto no puede vivir y tener su familia allá donde la delincuencia lo tiene “medido”.

II. Un policía decente necesita de un salario acorde (¡pero muy acorde!) a su peligroso trabajo.

III: Un policía ético necesita de una estructura judicial “a prueba de balas”.

IV. Un policía ejemplar necesita de una población que lo valore por lo que es y hace.

V. Un policía venezolano, debe manejar la constitución, las leyes y la venezolanidad por igual.

Por estas cosas:

a. Las fuerzas policiales elites y anticorrupción inicialmente instauradas deben vivir en puntos protegidos.

b. El resto de las policías recibirán facilidades para casas fuera de las zonas peligrosas.

Independientemente de lo que se materialice como estrategia contra el crimen, contra la corrupción y el tráfico judicial, y en contra del desprecio colectivo y la “sub-remuneración” de los hombres y mujeres del orden público, esto tiene que ponerse en práctica muy pronto.

La iniciativa de la policía nacional, debe erigirse como un importante hito en la definición de esta gran policía que debe administrar el orden que la justicia en nuestro país, pero no deben quedarse los esfuerzos en ella, pues aspectos básicos se están dejando a un lado, casi con el pretexto de incorporar a los agentes policiales a sus comunidades, como si su sola presencia fuera a cambiar las cosas mágicamente. Esta línea de pensamiento es típica del subdesarrollo.

…y compatriotas: Somos subdesarrollados.

La guardia nacional, al igual que la policía nacional, tienen serias fisuras en su estructura, lo cual las hacen “permeables” a lo que justamente queremos ser intolerantes. Comportamiento como estos, secundados por paupérrimos sueldos, frente a cuantiosas ganancias que les pasan por el frente producto del contrabando de aquellas cosas que, por estar incorrectamente amparadas por políticas comerciales, aduaneras y fronterizas supinamente desacertadas, solo hacen más débil nuestra frontera, las zonas fronterizas y las autoridades involucradas en ellas.

Harto conocidas son las soluciones que múltiples universidades, institutos de investigaciones y personajes académicos del país, han ofrecido para este complejo y político problema. Su solución definitiva comienza justamente con la parte política, donde el colectivo primero exija respuesta clara y sostenida en el tiempo, y segundo el gobierno de turno haga suyo el problema para el cual se le puso al frente.

Una última cosa les digo: El policía es un ser humano expuesto a lo más terrible que nuestra sociedad en tiempos de “paz” puede concebir. El trato que se les da, el reconocimiento y la oportunidad de superación que debe ir unido a nuestro esfuerzo por apoyarlos, debe ser intachable, como la labor que han de hacer.

domingo, 17 de abril de 2011

“Suspenden servicio del Metro de Maracaibo por mantenimiento”

Esta noticia corresponde a estos días de semana santa.

Buena oportunidad para decir que el cierre del metro, NO TIENE NINGUN IMPACTO en las posibilidades de desplazamiento a lo interno de la ciudad. Es decir: No hace falta que esté abierto; ¡como lo leen!

He tenido la oportunidad de ver este metro, y les digo que no había visto en Venezuela, una cosa que se pareciera mas al ya demolido muro de Berlín, en la antigua Alemania dividida.

Permítanme explicarles: Maracaibo, sin contar la artificiosa y convenientemente politiquera división hecha hace años que creó el municipio San Francisco (es decir, no consideraremos la parte sur que fue parte de la ciudad), es hoy por hoy un territorio con una extensión aproximada de 17 Km de largo, de norte a sur, por aproximadamente 9 Km de ancho de este a oeste en su parte más angosta (recuerden que como ciudad rivereña, el lago determina la forma de su límite oriental, mientras que las invasiones determinan su lado occidental).

Bueno, de esos 9 Km en su parte más estrecha, aproximadamente 6 Km los recorre el mencionado metro, e increíblemente, casi todo ese recorrido lo hace a nivel del suelo, ¡dejando en un tramo de unos 5 kilómetros, únicamente 2 pasos de norte a sur-sur a norte, para el tránsito vehicular!

¡Es simplemente impresionante!; así como lo leen: No es subterráneo, no es elevado en esos 5 km; simplemente lo impusieron a nivel del suelo, dividiendo en dos partes literalmente la ciudad.

Revisando fotografías y hablando con arquitectos y con la gente del sector, es fácil ver como esta obra de transporte terrestre, increíblemente resultó en un daño impresionante a la economía y aspecto de aquellos sectores por los que atraviesa. Es asombroso ver como no resultó en estimulo económico, ni social, ni técnico, limitándose quizás a las mejoras que obligatoriamente debió hacer en la infraestructura de aguas blancas y negras en el tramo de territorio que necesariamente debía modificar para adecuarlo a la instalación de los rieles y estaciones. Por cierto, solo poco más de dos km estas ya instalados en vías aéreas, que permiten el libre trafico por debajo, aunque tardaron tantos años en terminar esa sección (más de 10 años), que la economía del ese sector en particular, simplemente desapareció.

De resto, pueden ver como los mismos ciudadanos que se desplazan en vehículos, convirtieron vías independientes a cada lado del trayecto del metro de Maracaibo, en calles obligadas de doble circulación. Supongo que más de una familia se vio dividida por esta obra, teniendo que desplazarse una ridícula cantidad de Km para poder darle la vuelta a aquel armatoste y poder reunirse con quienes viven del otro lado de esa obra. Patético. No hay otra definición.

Luego, para ir al aeropuerto de Maracaibo, que se encuentra en las “afueras” de la ciudad (le está ocurriendo lo mismo que al de Maiquetía y al de Valencia: la improvisación y las invasiones urbanas están rodeando al aeropuerto, con sus futuras consecuencias negativas), deben circular por una autopista que al llegar a las cercanías de la división que causa el metro, colapsa ante el trafico que se produce producto de la desviación forzosa que creó este, para luego tener que circular por vías de doble sentido improvisadas por la misma ciudadanía, con un solo canal por dirección. Aberrante situación. Definitivamente.

El muro de Maracaibo, con su rieles y tendido eléctrico de por medio, con cercado metálico y alambrado de púas, es en definitiva, reminiscencia del viejo y casi olvidado muro que dividió a aquella célebre ciudad, con una diferencia fundamental: El de Berlín fue levantado por al odio político entre los hombres, mientras que el de Maracaibo, lo fue por la ambición económica de los pocos que tuvieron entre manos, el diseño e implantación inconsulta de aquella obra, que a más de 20 años de su inicio, no se le ve beneficio neto para su colectivo humano. Sé que el proyecto contempla otra sección o línea que será subterránea, pero el temor al daño que puede infringir, con el nefasto precedente establecido por el mismo metro en el tramo que he mencionado, es más que justificado. ¿Que tuvieron que comenzar la obra por el tramo menos rentable?; eso no justifica en daño resultante, porque la división de la ciudad ya es un hecho irrefutable.

Supongo que su directiva arderá en el infierno de la injusticia por lo que estoy escribiendo, más por no ser yo ni siquiera un usuario del mismo, pero les digo que sin importar lo que digan, durante décadas, -insisto-, el metro de Maracaibo solo ha dividido la ciudad, creado caos vehicular y depresión económica. Habrán invertido seguro miles de millones de dólares, pero nunca podrán despejar la duda de que entre tantos millones, más de uno no haya ido a parar a donde no debía, y que quizás con una fracción de esa inversión, un sistema de trolebús, o de redes eficientes de autobuses con unas vías públicas impecables, habrían tenido similar beneficio, en una ciudad que de por sí, es amplia y plana. La Siemens (principal contratista extranjera), es famosa por sus sobornos en países subdesarrollados (incluyéndonos), y la politiquería que ha estado involucrada en esta obra, seguramente terminó siendo la responsable de la división resultante en ese amplio sector de lo que debería ser una gran ciudad moderna, comercial, petrolera e industrial, y no el parapeto de bodeguitas, secuestros y de barrios soberanamente colombianos, donde la división de la ciudad, primero a manos de los políticos creando otro municipio para tener más cargos burocráticos, y luego a manos de un metro inconcluso y de relativa escasa afluencia de usuarios para un sistema de trasporte público como este, debido a que el mismo recorrido se puede hacer en bus en el mismo tiempo, y en carro particular en menos tiempo aún, está decretada ya, sin posibilidad de echar para atrás.

No digo que el metro de Valencia o el de Caracas sean una “oda” a la eficiencia y a la rectitud, pero compatriotas, ¡no dividen como lo hace ese instalado en Maracaibo!

Bueno sería entonces, sacar importante lección para el futuro que nos toca por construir.

Por “trueques políticos” la MUD escogió fecha de las primarias: Petkoff

El Sr Teodoro Petkoff, aquel que abogaba por el retiro de la oposición de las elecciones para la asamblea nacional en el periodo donde finalmente no fueron, sentenciaba recientemente con estas palabras un accionar de la famosa MUD (mesa de la unidad) oposicionista, en torno a la selección de la fecha para la escogencia de su candidato de cara a las elecciones del próximo año.

Muy acertado en su opinión a mi parecer; la oposición ha dado muestras claras de negociaciones y tráfico de poder con estas decisiones tomadas en su conclave político. Nada más lejos del espíritu que anima a la gente que no apoya al presidente; nada más corrosivo para la confianza en el ganador de ese proceso interno del oposicionismo, que esperar todo ese tiempo para seleccionar a su candidato. Obviamente, más de un precandidato se alegra con esto: es la oportunidad perfecta para seguir haciendo juego político, mientras se mantienen alejados del verdadero escenario de confrontación de ideas de y planes nacionales, de ideologías y concepciones de republica, como aquellos perros que desde el lado interno de la cerca, ladran con apariencia de furiosos, hasta que les abren el portón y salen despavoridos. Allí están seguros, cómodos, sin necesidad de ser sinceros, ni de arriesgar algo de su pellejo.

La realidad es que la arrogancia los está matando. Trafican influencias buscando unos, tiempo para aparecer en escena con fuerza, y otros para ver si logran dividendos políticos suficientes con el fin de traficar luego con ellas. Desde el exterior, otros tantos políticos persiguen su sobrevivencia en un entorno que los olvida de a poco. Los menos, se quejan de la dilación de la selección del candidato, a sabiendas de que su momento puede pasar con ello. Solo unos pocos, menos de los que puedo contar con una mano, lograrán sacar beneficios netos de esto, más allá de lo que la MUD puede proveer en su obtusa interpretación de la realidad.

El miedo al presidente es claro; la incapacidad para enfrentarlo efectivamente se hace evidente, conforme el tiempo pasa y la falta de coherencia se hace patente. La falta de un candidato coherente, capaz de mostrar un estilo y un plan de trabajo conforme a un proyecto claro de país, por lo menos un paso mas allá de el del presidente, ahora dilatado en su selección hasta febrero del próximo año, sino cambian las cosas, supondrá un revés para aquellos que no apoyan el proceso del gobierno presente.

Mas allá de la falta de un tipo que plante cara con los correctos argumentos al presidente y a toda su permanente y bien financiada campaña, esta la falta de interés por el bien nacional en esa MUD. Sus conclaves realizados fuera del país, allá donde solo los ricos y poderosos llegan, lejos del colectivo al que supuestamente se deben, no hacen más que corroer la precaria buena fe que la gente que los apoya ha podido depositar en ellos.

Ver reunidos a todos esos desvirtuados ancianos políticos, secretarios y funcionarios de viejos partidos, otrora culpables de la debacle que devino, no das menos que asco.

Algunos se lavan las manos diciendo que aunque no están de acuerdo, “por el bien de la unidad”, apoyarán la selección del candidato en febrero del próximo año, cuando en realidad lo que hacen es guardan bajo la manga un argumento que diga algo como “…se los dije que era un error, pero por el bien de la nación los apoyé”.

Hipocresías tras mentiras y mas hipocresías, son las que dejan ver las viejas y debilitadas costuras de los grupos políticos que solo buscan más poder, o cuando menos, las viejas glorias y comodidades de las que gozaron en la cuarta republica.

Dejar para el próximo año la selección de su candidato, -insisto-, muestra otra debilidad: la de no soportar unos rounds con el presidente. Pretenden escogerlo a última hora, sin mayor propuesta que mostrar, y esperar que solo el voto castigo, o el pensamiento reencauchado y cíclico de “…cualquiera lo hará mejor que este”, vuelvan a salvarlos y a elevarlos a la cúspide del tercermundista poder presidencial venezolano.

Están tan acostumbrados, que ya duermen y comen sobre sus propios excrementos, y hasta comienzan a verlos como bien legitimo de transacción política y de poderes.

No quisiera que el que gane lo haga por la debilidad patética del oponente, pero si nos toca eso, pues que sea. Siempre habrá una generación de relevo que logre sacarse de encima tanta porquería y mediocridad.

La MUD no es más ni menos que el buró del PSUV. La única diferencia está en que unos tienen el poder, y los otros, lo ambicionan.

Equilibrio perfecto que nos detiene a todos inútilmente. Por algo será. Por algo tenemos lo que tenemos.

WikiLeaks los vuelve a embarrar a todos, sin distinción; veamos con calma sus reacciones, y concluyamos con sabiduría y calma, para escoger el camino cierto que perdimos a la muerte de Simón Bolívar.

sábado, 16 de abril de 2011

¿Qué pasó con los informes sobre los fallecidos semanalmente?

Es uno de esos temas que miserablemente pareciera que alguien manda a callar, aunque espero equivocarme. Como muchos de ustedes, yo había pasado por alto la casi absoluta falta de estas informaciones en la prensa, que en realidad nadie quisiese que existieran como para publicarlas. No quiero dedicarle mucho al asunto, aunque no puedo dejarlo pasar y con ello rendirle “honor” a quien o quienes hacen del ocultar información para silenciar sus fallas, una costumbre.

Desde un tiempo ya no se habla de esto; no porque no existan cientos o miles de muertos al año en Venezuela, sino porque algo lo está impidiendo. No lo olviden. El silencio de los medios, no puede ahogar el dolor de los familiares de quienes fallecen. Más de 10 años después, aún recuerdo la fotografía donde un hombre arrodillado en el suelo, durante una visita presidencial a un hospital del centro del país, abrazaba desconsoladamente las piernas de un entonces novel presidente Chávez, descargando su dolor e impotencia ante el asesinato de su hijo, y tan solo clamando justicia por esta abominación.

Al ser padre también, verlo allí pidiendo justicia me conmovió profundamente, hasta las lagrimas. Como él, también me abracé a la esperanza de un cambio que pese a todo, se ha resistido a llegar.

Nunca he podido conseguir en internet esa foto; quisiera verle la cara al gobierno todo, contemplando una década después, esa fotografía, que resumía todo el dolor y la exigencia de justicia que los venezolanos han buscado y no han sabido encontrar.

Seguramente nuestro error está íntimamente asociado a nuestra incapacidad para construir algo que por no existir, no se puede encontrar.

Seguirán los medios maquillando la verdad por miedo a la censura y a la ley ilegitima que exija tal silencio. Podremos pintar y limpiar los barrios y las calles para que la sangre derramada no se vea, e incluso podremos escuchar a funcionarios públicos regocijarse hipócritamente por logros de pacotilla alcanzados en equis periodo de tiempo, donde se haya logrado "bajar" unos puntos porcentuales la muerte, pero ni aún eso, nunca, jamás, mitigará el dolor que a diario sufren quienes son víctimas de las más bajas desviaciones del hombre y su sociedad, y de sus mas cínica y repulsiva política: ocultar la verdad.

Aquella imagen del hombre arrodillado seguirá en mi corazón, mientras que la única esperanza de justicia, pareciera ser la de esperar que el bastardo (víctima sabe Dios de cuantos abusos a su vez), que asesinó a aquel amado hijo, haya sido ajusticiado por algún otro matón, o que terminara acuchillado en algún pabellón de una de las tantas abandonadas y salvajes cárceles de nuestra nación.

¿Queremos que esa sea nuestra única fuente de justicia?

¿No es acaso eso una distorsión sobre lo ya distorsionado?

Oculten lo que quieran y maquillen lo que les dé la gana con cuantas mentiras bien asesoradas se les ocurra; la gente no es estúpida. Solo inocente, pero hasta la inocencia se pierde.

Sigan sembrando vientos, y no se quejen por las tempestades que cosecharan. Sigamos permitiendo que “nos siembren”, y terminaremos estériles y sin vida, como un campo agrícola sobreexplotado y nunca fertilizado.

No lo olviden. Matar al mensajero no resuelve el problema.

Observen a su alrededor, en silencio, y la verdad se hará evidente entre ustedes. No emitan juicio sin antes meditar a lo interno de cada uno. Los políticos que viven de la política y no de servir a sus semejantes, quieren evitar justamente eso. No dejen pasar la oportunidad de arreglar las cosas para que sus hijos, o los hijos de estos, no tengan que vivir en un mar de hipocresía como nosotros, donde siempre los menos, son los que más. Interpreten sabiamente ustedes el resto.

miércoles, 13 de abril de 2011

Lo que no decimos de aquel Abril de 2002.

No les voy a hablar de lo obvio y de lo ya dicho.

Sabemos que mucho falta por contar de aquellas fechas en nuestra historia reciente; Todos presentimos que ambas partes participaron abierta o encubiertamente en esos eventos. Nadie a estas alturas duda de los intríngulis que existieron y que aún hoy se arrastran como serpientes envejecidas y gordas entre nosotros.

Todos estamos claros que fue un golpe, pero… “una estupidez de golpe”.

Nadie sabe como por TV salen un poco de militares diciendo cuanta cosa se les ocurría, mientras el presidente daba muestras de no poder controlar la situación (!), al tiempo que sindicatos, iglesia católica y petroleros devenidos estos últimos en especie de mafia extorsionadora, daban “partes de guerra” con la anuencia diaria de los medios de comunicación y del propio gobierno.

En esos días, miles de personas, como no se ha visto antes (o después) en Venezuela, mostraban su descontento con las políticas en vigencia del gobierno de Hugo Chávez, (aunque no supieran con claridad cual era la alternativa, cosa que a su vez propició los abusos que vimos en esas mismas jornadas), en las calles, al tiempo que quizás los más radicales entusiastas del gobierno de turno rodaban en motos, defendiendo al presidente de no sabían que cosa.

En el ínterin, la mayoría presenciaba desde sus casas y trabajos, -con cierta incredulidad-, los eventos que se sucedían, como quien no acierta a creer que del escándalo Protagonizado entre las partes, se pasaría a esto, sin que supiésemos de los planes que cada lado, desencadenándose por fin el desorden cuando aquel célebre general lanzó su lacónica frase “…el presidente renunció…”.

De allí en adelante, el caos, la muerte, la mentira, el tráfico de poder y los intereses de no pocos venezolanos y extranjeros, así como representantes y diplomáticos de naciones que corrían sin control en la Caracas del momento, procurando tomar posición estratégica para lo que viniera.

La estupidez de golpe”, se había concretado.

En un instante dado, un inoportuno y ridículo Pedro Carmona Estanga, con toda la parafernalia propia de Fedecamaras, se reúne con un grupo, -no menos ridículo- , de gentes, todos huérfanos del poder que los cobijó y apadrinó en algún momento. Allí, en cadena conveniente de medios a nivel nacional, “Pedro el breve”, -como lo llamarían luego-, deshace de un plumazo todo lo que se había hecho en materia de reformas, sin importar su efectividad o no, en medio de autoproclamaciones y vítores de quienes estaban presentes, celebrando de antemano el regreso del statu quo del que gozaron.

¡Como se veían locos por volver al pasado, renegando lo sucedido como si de una pesadilla para sus parcelas de poder se tratara!

Del otro lado de la ecuación, un gobierno nacional débil, desdibujado, sin brújula propia, pedía orientación, mientras el presidente era conducido mansamente a un cómodo exilio temporal y circunstancial, en la isla de la Orchila, desde hace décadas, refugio vacacional para cuanto familiar presidencial quisiera armar fiestas.

No mucho debió hacer el gobierno; la fortuna hizo que todo aquel parapeto por lo mal armado que estaba, monumento a la improvisación y a la estupidez de lo que lleva la marca “hecho en Venezuela”, se cayera definitivamente por sí solo.

La estupidez de golpe había terminado.

Resultado: un gobierno que se levantó con un radicalismo predecible, y una oposición que se lanzó al oposicionismo torpe y visceral.

Conclusión: Pérdida de tiempo para todos, valores desdibujados y la Venezuela que tenemos hoy entre manos, con sus virtudes y sus males medulares intactos.

Casi 10 años después, nos vienen sectores del gobierno y del estado, con eso de que van a acelerar las investigaciones, o que van a investigar esto o aquello.

¡Hipócritas! Pedro Carmona tiene años en Colombia y nada que lo piden en extradición, (al menos, con la misma resolución que al delincuente Makled), pero eso si, como se “afincaron” con los peones de ese triste ajedrez que jugaron en esos días y que hoy purgan condenas emergidas de juicios de dudoso proceder.

A juicio van los mas pendejos, o el que no tiene con qué pagar. Punto.

Les digo algo: Los principales actores del momento, básicamente salieron tranquilos, como si no pasara nada.

Son 5 los personajes emblemáticos que nunca fueron tocados por su participación de forma directa, pese a que sus acciones u omisiones agregaron combustible al fuego:

Lucas Rincón, quien siendo el de mayor jerarquía dentro de la institución castrense, dijo tranquilamente por TV, que el presidente había renunciado, desencadenándolo todo, para acto seguido, desaparecer misteriosamente.

Pedro C. Estanga, por auto coronarse presidente y haber sido el estúpido de esa jornada.

Manuel Rosales, por haber firmado el despreciable decreto siendo un gobernador en representación de los otros firmantes. ¡Qué distinta seria su imagen si en medio de esa cadena de medios, y estando en frente de Estanga, le hubiera roto en la cara el miserable decreto, al tiempo que lo llamara golpista!

Diosdado cabello, que siendo vicepresidente, fue a esconderse como si el asunto no tuviera que ver con él. Ante la falta del presidente, tenía que haberse presentado con firmeza, para asumir el mando. Distinto hubiera sido todo entonces.

Por último, y con el respeto que su investidura merece, Hugo Chávez, por haber permitido, la suma de eso eventos. El fue el principio y el fin de este cuento que no sabemos si nos lo contaron, o si lo inventaron.

¿Astucia extrema o suerte de principiante?

Nota: El resto de los firmantes deberían estar siendo procesados, y sus nombres publicados, pues al firmar, no renegaron del presidente en ejercicio, sino de toda la estructura jurídica de la nación

En todo caso, y volviendo al presidente, la providencia quiso que tuviera 10 años de gobierno extra, lo que a nosotros, pasado el mismo periodo, nos dio un mayor grado de madurez política, para acompañarlo o despedirlo.

Les recuerdo que no soy historiador ni reportero; solo les cuento lo que yo vi por televisión como cualquier otro: Las cadenas de Globovisión con su aterrador tema musical de fondo permanente; los medios impresos luchando por la primicia, y algunos periodistas muy contados, señalando los errores que se estaban cometiendo, a través de la radio.

Solo recuerdo mi renegar frente al TV, por un sonriente Estanga mientras se sentía presidente de la república. “No es posible”, me decía; “Esto va a terminar mal”, “¿Quién les dio el derecho a violar también la constitución?”, me repetía…

El resto de la historia, como les decía, la conocemos todos. Hago esta breve reflexión porque no quisiera queridos compatriotas, que nuestra débil memoria terminara siendo “ayudada” por las “muletas” que son las versiones “históricas y convenientes” de una parte u otra.

Considero que estos personajes deben hacerse un profundo examen de conciencia; al menos, tan profundo como el que debe hacerse cada buen venezolano sobre este territorio. Sabemos por tanto comentarlo, que ningún error se rectifica, sino se acepta primero la responsabilidad de lo sucedido, y la obligación de rectificar.

sábado, 9 de abril de 2011

Sobre las fallas del servicio eléctrico nacional.

La realidad es esta: El sistema eléctrico venezolano es como una buseta, micro, bus o colectivo, según prefieran llamarlo, que siendo viejo y obsoleto, con mas horas a cuestas de las permitidas, sigue rodando y repleto de pasajeros, pues incluso lo que no ocurría antes (llevar gente colgando por fuera), ahora lo hace. Por supuesto, el vehículo tiene piezas nuevas y otras de segunda mano, que se han comprado e instalado de varias maneras, con lo cual la vieja máquina de transporte público, sigue funcionando y prestando su servicio, aunque lo haga en una ciudad muy distinta a la que décadas atrás, llego siendo nuevo.

Hoy, esta unidad está desfasada, y pese a que funciona y cumple su cometido, lo hace con tiempo extra sobre su vida operativa real. Mientras, los usuarios se han ido acostumbrado a tener que bajarse para empujarlo a veces, o para descansar del calor mientras el chófer lo repara.

Ya no da para más, pero lo siguen usando, y el chofer, -que vive de el-, siempre con cara de autoridad, continua afirmando que está perfecto, y en condiciones optimas de funcionamiento; “hace días le hicimos el motor nuevo!”, como si ello decretara la eterna juventud de viejo y cansado vehículo. Ya la autoridad competente que autoriza su uso fue debidamente sobornada y muy presta firmó y selló la autorización de circulación respectiva. Ya los fiscales ni lo paran en la calle, porque ellos mismo lo usan para transportarse.

Dicen que hace falta un nuevo vehículo adaptado a las necesidades de la ciudad de hoy, pero nadie termina por comprarlo, pese a que el dinero ha estado por allí más de una vez. No se sabe si lo usaron para comprarle piezas viejas al obsoleto vehículo, o si habrán sido desfalcados por malas manos.

Mientras, el pueblo todo sigue acostumbrado al viejo bus, resignados a despotricar e insultar al chofer, solo cuando se queda por una falla.

Sigamos así, que vamos bien…

Reconocer las fallas y caminar sobre la rectificación del camino, no es lo mismo que reconocer las fallas, decir que hay que rectificar, y seguir en lo mismo.

Aun hay oportunidad para mejorar, pero debemos asumir nuestras fallas con paciencia y con algo que no tenemos a menudo: Disciplina.

Seguramente hay una manera de modernizar el sistema eléctrico nacional, sin que otras naciones se aprovechen de nosotros, junto con sus transnacionales. Seguramente habrá una manera de no destinar 1000 millones de dólares, sin que 800 sean dilapidados y desviados a bolsillos particulares o a proselitismo político.

Seguramente habrá una manera de poner en práctica toda la buena intención de las políticas socialistas, sin que sus logros sean distorsionados por personalismos, o erradicados por intereses mezquinos acostumbrados a ganancias desproporcionadas.

Nos ha costado tanto, que de hecho proseguimos cómodos en el mismo y desajustado vehículo, contentándonos con vivir en el, cambiarlo de color, llamar camarada en vez de chofer al que lo maneja, y cambiarle el nombre una y otra vez a la misma unidad, mientras que por supuesto, cada vez mas asientos en la parte de atrás se llenan de funcionarios públicos que aumentan día a día la cantidad de papeleo necesario para transportarse en el, con unas entradas donde con mayor frecuencia hay personeros cobrando peaje, influencias con el colector y un largo y desagradable etc.

En suma, hay que mejorar el sistema eléctrico con algo más que lo hecho o intentado hasta ahora. Es tomar lo mejor hasta hoy, y mezclarlo con lo aún no implantado pero que técnicos y planificadores del sector, saben que es lo acertado. No hay otra vía; no hay soluciones reales “importadas”.

Mientras decidimos sobre este importante tema, -una vez más-, la Caracas electoral pesa más que el resto del país, y con ello se salva de ser lanzada a la hoguera del racionamiento. Una comodidad peligrosa y engañosa, que engorda y hace perezosa a la otrora Caracas revolucionaria, ahora arrogante pero ingenua, si esa combinación es posible.

lunes, 4 de abril de 2011

Recordando de donde viene tanto dinero.

Ante un nuevo año en las finanzas del estado, pasado el primer trimestre, y con un petróleo que ronda nuevamente los 100 dólares americanos, más otros ingresos que a veces se nos pasan por debajo de la mesa, es bueno recordar con cuanto, según la asamblea nacional, cuenta el gobierno para ejecutar lo que considera necesario.

Un artículo publicado hace un par de meses en la página web aporrea.org, nos ilustra sobre el monto disponible, y el origen del mismo.

Miles de millones de dólares en resumen, que nos hace pensar en por qué se hace necesario conseguir préstamos en el extranjero, al mismo tiempo que donamos o prestamos dinero. Contradicciones que desde un primer vistazo, nos llaman a la reflexión, y que invitan a analizar aunque sea superficialmente, las fuentes de ingreso del estado venezolano. Esto, sin contar los excedentes producto del diferencial entre el precio del petróleo presupuestado, y el valor real en el mercado, excedente que finalmente es gastado sin que NADIE sea capaz de rendir cuentas sobre su uso.

Les anexo textualmente lo publicado en dicho portal:

Presupuesto Nacional del 2011: 204. 208 millones Bs.

Fuente de Ingresos Corrientes Ordinarios (ICO)

1. Al SENIAT le corresponde de recaudar 110.060,8 millones de bolívares, es decir,67,2% de los ICO de la siguiente forma:

  • IVA: 61.366,3 millones de Bs., es decir, el 37,5% de los ICO
  • Impuesto Sobre la Renta (ISLR): se espera aportar 30.220,3 millones de Bs.
  • Renta aduanera: 9.119 millones de Bs.
  • Otros impuestos: 9.355,2 millones Bs.

2. Aporte Fiscal Petrolero: 45.367,3 millones de Bs., es decir, el 27,7% de los ICO

En términos generales, lo que más les habrá llamado la atención es la cantidad de ingreso que genera el IVA; ESE IMPUESTO SI QUE ES SOCIALISTA!

Se aplica por igual, sin discriminación ni clases; no importa si ganas sueldo mínimo o 10 veces ese monto; igual vas a pagarlo, aunque para el que gana mucho, eso es pírrico, en contraposición al más sencillo que gana uno o dos unidades sueldos mínimos.

Nunca entendí por qué un impuesto de emergencia, como lo fue el IVA, creado por el entonces presidente Rafael Caldera, quedó establecido como fuente de ingreso permanente, aun con un petróleo que aumentó hasta diez veces su valor promedio desde entonces.

¿Por qué tanto dinero entre nuestras manos sin que le veamos una justa proporción de riqueza socialistamente distribuida?; no hay un límite al monto que es capaz un estado de gastar sin poder rendir cuentas?; por qué nuestra capacidad de ahorro es tan limitada en nuestra conciencia?; por qué esa actitud de gastarlo todo ahora, sin importar demasiado el porvenir y quienes habiten en esos tiempos?

¿Por qué somos tan irresponsables?

¿Por qué hemos tenido tanto y disfrutamos de tan poco?

¿Quién le hace pagar al que tuvo la idea de gastar miles de millones en el cambio de moneda a bolívares "fuertes", sin haber logrado antes detener la enfermiza inflación?

¿Por qué en una supuesta salud pública gratuita, aquel que deba ser cateterizado e implantado con alguna malla en una arteria, por citar un ejemplo, debe desembolsar entonces 20 0 30 mil bolívares de los actuales?

¿Por qué una paciente de cáncer de mama tiene que hacer verbenas y bingos para recolectar dinero pasa sus quimios, en un país podrido en petróleo como este?

¿Sera que estamos “podridos”, pero en corrupción que ni 12 años de gobierno del actual presidente han podido doblegar?

Les voy a decir algo: Si yo fuera autoridad en este país con la fuerza para reparar el sistema de salud en Venezuela, o el de justicia, y en solo dos años no lograra corregirlo, de inmediato les pongo mi cargo a la orden y me declaro incapaz de cumplir lo que se me pidió. (¿O será que nunca me pidieron ni exigieron eso?).

Parece que ha sido más fácil intentar montar un sistema de salud paralelo (barrio adentro), o judicial (comunas y demás yerbas del poder popular), que sacar a los corruptos y sus mafias.

¡Cosa brava en este país nuestro, hermano!

¿Saben que me calienta el alma?; pensar que con el IVA que pago, ayudo a financiar una escuela de medicina en otro país, mientras aquí, los niños afectados terriblemente por ingesta de cáusticos “accidentalmente” (en realidad por la ignorancia y subculturización que galopa sobre nosotros…), no tienen ni un equipo de especialistas que los atienda.

Una profunda, más bien profundísima reflexión debemos hacer, porque estas cosas tienen que detenerse. No podemos seguir tolerando este tipo de abusos, negligencias y desvíos de dineros públicos.

Seremos tan jetones (y me disculpan el termino por favor, porque estoy harto de esto ya), como los que mandan, si no exigimos dar un alto a esto a quien elijamos como próximo presidente.

Si el tipo que se siente o se vuelva a sentar en la estúpida silla de Miraflores, no puede enmendar o dar signos inequívocos de cambio contundente y hasta verdaderamente revolucionario en 12 meses, tiene que largarse de inmediato con una averiguación judicial por delante, sin libertad para salir del país hasta tanto sea liberado de cualquier sospecha.

¡Carajo!, si yo gobernara solo, no digo les pido toda la vida para ir por mi cuenta cambiando las cosas, pero ¡no compatriotas, esa no es la realidad!, el que se siente allí es a gobernar con todos nosotros apoyándolo para que elimine del sistema de gobierno y sus conexos, con la justicia del caso, a los corruptos y administradores dolosos, junto con los traficantes de influencias y empresarios de maletín, que le abrirían el paso a las cárceles a los violadores y asesinos.

¡Nunca ha estado Venezuela tan cerca de justificar la pena de muerte para acabar con los que una y otra vez vuelven a las andadas y roban sin compasión!

¡No podemos permitirnos llegar a ese punto!

¡Por Dios compatriotas, reaccionen!

Se los he comentado con la humildad que me ha sido posible reunir: hemos tenido, y tenemos tanto dinero entre las manos, que tal cantidad se hace ya imposible de medir en términos de aprovechamiento o de despilfarro. Eso debemos corregirlo de inmediato. Tal masa de recursos no puede gastarse sin guardar una parte, sin invertir otra, sin usarla para salvar vidas venezolanas primero, y sin contabilizarla toda.

Si con todo lo alto que está el precio del petróleo, y la enorme masa de dinero que supone, ésta aún se queda “pequeña” frente al dinero que es presupuestado vía impuestos, obtenidos de todos y cada uno de los venezolanos, sin deferencia de capacidades económicas (caso del IVA), y aún ello no es suficiente, usándose tal argumento como justificativo para la obtención de ingentes cantidades de dólares por medio de préstamos suntuosos y difíciles de pagar, no puedo decir menos que vamos mal.

Solo puedo invitarlos a recabar números y datos (que aún sean posibles obtener abiertamente), para que construyan su propia y certera visión de lo que está ocurriendo. No se confíen demasiado de los medios de comunicación (ni siquiera de éste), pues más de uno de está parcializado en algún sentido.

Recuerden que este asunto va más allá de cualquier gobierno de turno; tiene directa relación con nuestra incapacidad para quitarnos la venda de los ojos y detectar los problemas medulares para los cuales ningún político se para a decir algo, y mucho menos a proponer soluciones, como mucho por saber los riesgos políticos que para el mismo ello supondría. Si eso no es verdadera traición a la patria, no sé que lo es entonces.

Busquen identificar aquello que aún hoy, nos aleja de la prudente planificación que requerimos. Identifiquen a los elementos humanos que colocan trabas y aumentan el factor riesgo. No los enfrenten; solo ignórenlos y déjenlos a un lado en esa marcha hacia una Venezuela mejor, y por fin “venezolanizada”.

No olviden de donde sale cada dólar y cada bolívar empobrecido que es robado, desviado o mal gastado en nuestra patria. No olviden donde viven ellos, con quienes se codean, ni en qué países se resguardan. Tampoco dejen de anotar a las naciones que se aprovechan de nosotros. Hacer cumplir la justicia y perdonar, es acción loable de una sociedad como la nuestra, pero olvidar como lo hicieron, para que evitemos repeticiones, no nos debe estar permitido.